domingo, 1 de julio de 2012

LAS SIETE CARACTERÍSTICAS DE LA POESÍA MODERNA


La primera característica que podemos enunciar es que la poesía moderna (desde Charles Baudelaire hasta nuestros días) no tiene un espíritu didáctico, es decir, poemarios como Las flores del mal o Trilce no poseen como uno de sus objetivos centrales enseñar valores o actitudes al lector. En ese sentido, se aleja del principio de Horacio de unir lo agradable a lo útil[1] para propugnar una escritura sugerente que jamás subestima la capacidad interpretativa del lector.

Un segundo rasgo constituye el hecho de que el poeta moderno es siempre un operador de lenguaje y, en consecuencia, manifiesta una actitud crítica. Vale decir, al manipular el lenguaje el poeta revela una conciencia crítica en relación con la relectura de la tradición literaria. Esta particularidad que ya había aparecido anteriormente (por ejemplo, en la literatura de la Edad de Oro con Góngora o Quevedo), se intensifica en el contexto de la modernidad. En otras palabras, el poema moderno está hecho con palabras dispuestas en un orden determinado y no tanto con ideas; por eso, el texto poético no admite una paráfrasis empobrecedora sino una lectura que ponga de relieve la autonomía del discurso literario.


Una tercera particularidad radica en el papel del significante en la poesía moderna. Allí, el significante tiene una cierta autonomía en relación con el significado, fenómeno que se evidencia en las jitanjáforas, en los caligramas o en los poemas donde el componente fonológico adquiere importancia sin remitir directamente a un determinado significado. En algunos casos, los poetas crean nuevos significantes: "altazor", "trilce", por ejemplo. Así se cuestiona una racionalidad utilitarista que reduce el lenguaje al de mero instrumento comunicativo y que empobrece, por lo tanto, su riqueza fonológica o expresiva.

Este trabajo con el significante nos lleva a una cuarta característica: la especialización, en el ámbito de la modernidad, del trabajo del creador. No cabe duda de que hay muy importantes antecedentes: Góngora, verbigracia, era un especialista y conocedor de su arte. Sin embargo, la modernidad implicó un sostenido proceso de especialización del trabajo que influyó en el campo de la poesía. El poeta se convierte en un especialista, pues domina el ritmo, la métrica, la disposición gráfica, la prosodia, etc. Rubén Darío y Stéphane Mallarmé son ejemplos muy claros de este proceso.

El quinto rasgo se puede expresar de la siguiente forma: hay una tendencia al cruce de géneros y de estructuras en la poesía moderna. Tenemos poesía "teatral" (T.S. Eliot), poemas en prosa (Rimbaud), poesía polifónica (Pound, poetas beatniks), caligramas (Apollinaire, Huidobro), escritura prosaísta (grupo Hora Zero en el Perú), poemas elaborados a partir de un collage de citas ("En defensa de César Vallejo y los poetas jóvenes", de Antonio Cisneros

[2]), textos cercanos al panfleto político-partidario (Canto general, de Neruda), entre otras posibilidades.

La sexta particularidad la tomamos de Estructura de la lírica moderna, de Hugo Friedrich. En efecto, él habla de la disonancia de la poesía moderna
[3]. En otras palabras, el poema en el contexto de la modernidad manifiesta una cierta tendencia al hermetismo (Rimbaud, Mallarmé, Vallejo, Eguren, Adán, por ejemplo) y a la oscuridad deliberada. Disonancia quiere decir, en este caso, que se une el hechizo a lo ininteligible. Por consiguiente, el texto poético gusta y "hechiza" al lector, pero este último no puede fácilmente descifrar el sentido del mismo. Pareciera que la significación del poema se escapara y se resistiera al proceso de desambiguación.La séptima característica ha sido sugerida por Umberto Eco[4] y consiste en que el poema moderno formula la poética de la obra abierta porque presupone un lector activo que construya la significación discursiva y sea un libre ejecutante que llene los vacíos dejados por el texto poético. El poema moderno no es una obra cerrada sino que posibilita que el lector se autoasuma "como un sujeto que realiza una improvisación creadora de 'infinitas' posiblidades de significación"[5].Indudablemente, estas siete características no se cumplen en todos los poetas desde Baudelaire hasta nuestros días, pero pueden servir de punto de partida o de hipótesis para una reflexión sobre la poesía moderna.
NOTAS
[1]. "Los poetas quieren ser útiles o deleitar o decir a la vez cosas agradables y adecuadas a la vida. Cualquier precepto que se dé, que sea breve, para que los espíritus dóciles capten las cosas dichas de una forma concisa y las retengan con facilidad". Aristóteles [y] Horacio. Artes poéticas. Madrid, Taurus, 1992; p. 140.[2]. Cisneros, Antonio. Poesía reunida. Lima, Editora Perú, 1996; p. 111. Se trata de un poema de Agua que no has de beber (1971).[3]. Cf. Friedrich, Hugo. Estructura de la lírica moderna. Barcelona, Seix Barral, 1974.[4]. Cf. Eco, Umberto. Obra abierta. México, Ed. Origen/Planeta, 1985.[5]. Fernández Cozman, Camilo. Las huellas del aura. La poética de J.E. Eielson. Lima-Berkeley, Latinoamericana Editores, 1996; p. 88. (Se trata de una paráfrasis de las ideas de Eco). En este libro desarrollo con mayor detalle la poética de la obra abierta.[6]. Marchese, Angelo [y] Joaquín Forradellas. Op. cit., p. 217.[7]. Voloshinov, Valentin N. El signo ideológico y la filosofía del lenguaje. Buenos Aires, Nueva Visión, 1976; p. 108.[8]. La expresión es de Julia Kristeva. Véase el Diccionario de retórica, crítica y terminología literarias, de Angelo Marchese y Joaquín Forradellas. Barcelona, Ed. Ariel, 1989, p. 217.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Sin duda alguna has hecho una valiosa contribucion a la definicion de la poesia moderna atravez de sus caracteristicas, pero me atreveria a decir que aquel que solo tienen el interes de enunciar sus pensamientos y experiencias en una manera organizada y desde el punto de vista confidencial interpretable; ?no es acaso escribiendo poesia?

Anónimo dijo...

pss a mii mee interezariia saber mucho sobres las caracteristicas de la poesia hispanoamericana
en geneRaL desde antes hasta ahora....
espero ii lo tomes en cuenta para qee muchas personas sepàn sus caracteristicas sobre la poesiia

por otra partee tu pag. es buena solo qee tambien mee atrevo a decirt qee muchas personas expran su punto de vista a travez de la poesia ii siin decirlo directamente


gracias por todo

Will Camajou dijo...

La poesía no se hizo para "decir", la poesía sirve para expresar. El trabajo poético es una transfiguración del lenguaje para expresar mundos inverosímiles que, de otro modo, serían difíciles de sostener con un lenguaje denotativo; pintar, recrear o destruir tales mundos es parte de esa transfiguración, es decir, la experiencia más cercana a lo onírico, donde el que sueña se deja llevar por un ambiente en cual las reglas .

Anónimo dijo...

La destreza formal. -el dominio de la métrica y de las figuras retóricas- es un rasgo de la poesía clásica que autores como Valery y Eliot recuperaron para enfrentarse al romanticismo. Ya los clásicos tenían plena conciencia de la materialidad del significante. Si una línea de la poesía moderna comparte el cuidado de la forma con la poética del clasicismo, no es el cuidado de la forma lo que la distingue de la poesía escrita hace cuatrocientos años.

Ahora me pregunto ¿A cuento de qué convertimos la poética de Baudelaire en la medida de lo que es moderno en poesía? ¿Es que no son poetas modernos los que aspiran a deshacer las formas? ¿No es moderno Tzara? ¿No es moderno Bretón?

Uno de los rasgos de la poesía moderna quizás sea el que no se deja encuadrar en un listado de características. Además, esas características pueden ocultar poéticas enfrentadas. Valery y Eliot detestaban ciertos aspectos del romanticismo, pero la fragmentariedad y el cruce de géneros son rasgos de cierta poesía romántica.

Ernesto Rivera

Camilo Fernández Cozman dijo...

Efectivamente, Ernesto, ya aparecía la destreza formal en la poesía clásica. Los poetas modernos no descubren la pólvora. Baudelaire no es la medida de la modernidad pero, según Friedrich, es uno de los fundadores, como lo hizo Whitman. Tzara y Breton también son modernos sin duda. No creo que la fragmentariedad sea un rasgo clave de la poesía romántica.

Will Camajou dijo...

(...) en el cual las reglas son inexistentes, o al menos, la única regla es soñar...

Camajou
5años después.